jueves, 6 de noviembre de 2014

Combustible

Renuncié a la esperanza que me ataba a los caprichos de ser normal.
Y es verdad, es cómodo quedarse en principios, cantar a la revolución y jurar de rodillas que la vida en tanto pueda esperarse llegará, pero no. Las fronteras que pactaron algún día con mi mala suerte, lo que planeaba amar,  de poder existir de la manera más poca ambiciosa y simple no es mi estilo, y es que en mis latidos que ya duelen un tanto tras los gritos me invitan de mejor manera a manifestarme tal cual soy. Por más que tenga botellas acompañándome en la bohemia, tendrá que salir la valentía y apoderarse de todos los días, y respirar un aire ( al fin) sincero para no ser un bastardo de lo que podría ser, por que soy feliz con lo que soy, por que sé que tome el camino correcto, y en este convencimiento se que no vivo a medias, que no me falta nada para ser más completo si no que herramientas para terminar de cumplir mis sueños.

Tal vez un abrazo, total el romanticismo no está nunca de más.

lunes, 3 de noviembre de 2014

El eterno domingo

Resistí este gran fin de semana, pero ya es lunes.