Se que no te enloquezco.
Presumo que esto es demasiado estable para ti.
Creo que te agradann las sorpresas, por eso esperas.
Aunque, ¿sera necesario?.
Me gusta tu sonrisa al hablar de lo nuestro,
esa que me indica que hoy somos más de lo que esperabas.
Adoro los instantes en los que te arrebato el miedo,
y tu desprotegida apariencia se transforma en euforia ...
ahí si te vuelvo loca.
Entonces,
¿Sí o no?,
¿Porque existe esta dualidad?
¿Porque me asusto al pensar demasiado?
Porque escucho de vez en cuando una siniestra voz que
me dice que no me quieres? ... por que eso.
Yo no tengo a nadie más que creerle,
mi templo hoy es tu silueta frente a la luz,
que te sonrojes porque la miro descaradamente.
Que me extrañes es mi delirio,
que te sorprendas de pequeños detalles, que a veces siento voy en lo correcto.
Estoy perdidamente enamorado de ti ... y no creo que tu no me quieras,
Solo dudas, como todos supongo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario